El pasado 18 de junio, en el Teatro “El Tinglado”, la sala estalló en aplausos ante el espléndido debut de la obra “El deseo del otro” dirigida por Mario Schajris.
La comedia protagonizada por Ernesto Claudio (como Roberto Anibal López ) y Gabriela Licht (como Silvia Abramovich) narra la historia de una familia que se enfrenta ante un problema cuando su hija Mora Monteleone (Laura) se prepara para mudarse a París.
Un cuarto libre y una casa chica pueden ser suficientes factores para la pelea de un matrimonio que, como es de imaginarse, tenía proyectos diferentes para esa habitación. Silvia, psicóloga estudiosa y reconocida, quería hacer uso de la sala como su nuevo consultorio para independizarse por completo de sus padres, mientras que Roberto soñaba con convertir el cuarto en la nueva alfombra mágica que lo llevaría a ser relator de fútbol.
A medida que la historia avanza, comenzamos a empatizar con cada uno de los dos personajes, que como es visto desde el comienzo, vienen de clases sociales totalmente distintas. Roberto había dejado su sueño de lado para trabajar en el almacén de su suegro para llevar lo mejor a su familia y Silvia se había formado como profesional, viajaba a congresos con sus amigas cada tanto; pero, ¿cuánto influiría el deseo del otro en la historia?
Con una simple escenografía y un excelente juego de luces, la obra te lleva a navegar, no solo con dicha apuesta, sino también con el inconsciente más profundo de los protagonistas, logrando que el espectador se interiorice con lo narrado.
Una obra destinada a parejas que pueden sentirse identificadas con la historia y creada para pasar un buen momento entre conocidos, donde se puede destacar la trayectoria de Ernesto Claudio y el acting de su esposa, Gabriela Licht. Un maravilloso trabajo en equipo que, al final, hizo ponerse de pie a grandes artistas como Patricia Sosa, Víctor Hugo Morales y Oscar Mediavilla, quiénes estuvieron presentes en la primera performance del elenco.